17 de julio 2023 EDITORIAL.- NO MÁS SOCIALISMO

EDITORIAL
NO MÁS SOCIALISMO
Una observación sencilla de la escena política actual en Venezuela encuentra al socialismo en bancarrota teórica, aunque subsiste el ansia de criminal dominio para controlar el poder.
A pesar de que estamos convencidos y pensamos que la historia nos demuestra en forma clara y completa, que el socialismo ha fracasado en su esencia. Quedan aún, algunos obcecados que se empecinan en seguirlo negando. Niegan que las experiencias de la URSS, China, Corea, Vietnam, Europa Oriental y mas recientemente Cuba, Nicaragua, Venezuela. Si estamos de acuerdo en este punto, nos parece que también tendríamos que estar de acuerdo en que esta sistemática para tratar de imponer un ideal, no ha sido en absoluto satisfactoria, y en nuestra particular opinión, mucho menos que satisfactoria, sino directamente nefasta. Definitivamente no podemos menos que sentirnos asqueados y horrorizado. Baste señalar algunos nombres de personas y lugares tales como Stalin, Trotsky, Kerensky, Pol Pot, Mao Tse Tung, Fidel Castro, Hugo Chávez, Nicolás Maduro, El Gulag, los campos de concentración en la Siberia, la KGB, las razias, el hambre, la miseria y la pauperización creciente de los pueblos donde ese nefasto modelo ha sido implementado. Ya en Venezuela lo estamos viviendo con esta cruel dictadura socialista de hambre y represión. De cercenación de todos los derechos de libertad.
La conclusión a la que se arriba no puede ser otra que; afirmar que la tentativa de imponer el socialismo es cruel y sanguinaria y ha dejado en el camino, un tendal pavoroso de víctimas. Sin contar que el aplicado en Venezuela tiene contubernio con el crimen organizado, guerrillas y el narcotráfico.
Es por ello que socialismo y capitalismo son antagónicos.
Definitivamente el socialismo no puede satisfacer las necesidades económicas de las personas o su anhelo de libertad.
Nuestro objetivo fundamental es defender la superioridad del Capitalismo Liberal sobre socialismo, no solo por su eficiencia económica, sino también por su superioridad moral y las posibilidades que ofrece para que los seres humanos prosperen. Aquellos que valoran el individualismo, el merito ciudadano y la igualdad de oportunidades encontrarán estas cosas en un sistema capitalista, siempre que brinde oportunidades educativas para todos.
A diferencia de las sociedades socialistas, las sociedades con libertad política, junto a un sistema capitalista o de libre empresa en el ámbito económico, tienen una prodigiosa capacidad de adaptación. Un sistema capitalista está constantemente en movimiento para satisfacer los deseos y necesidades de millones de individuos diversos. Todos los días, un sistema capitalista equilibra la prueba y el error para evaluar nuevas tecnologías, nuevas formas de hacer las cosas, nuevas formas de mejorar las tecnologías y nuevas formas de administrar los negocios.
Debido a la competencia, una empresa bajo el capitalismo sobrevive solo en la medida en que ofrece a los consumidores un producto que disfrutan o necesitan a un precio razonable, ya sea automóviles, alimentos, vivienda o ropa. Y esto es cierto incluso para los sistemas hospitalarios y los proveedores médicos, que compiten por el negocio de los pacientes para, digamos, cirugías seguras y exitosas.
El capitalismo es una economía basada en mercados libres donde los recursos y las empresas son de propiedad privada. En un sistema de mercado, las empresas tienen incentivos para ser productivamente eficientes, reducir costos para mejorar la competitividad y la productividad. Si las empresas no siguen siendo productivas y eficientes, cerrarán. La gran virtud de un sistema de libre mercado es que no le importa el origen de la gente; no le importa cuál sea su religión; solo le importa si pueden producir algo que usted quiere comprar. Es el sistema más efectivo que hemos descubierto para permitir que las personas que se odian se traten y se ayuden entre sí.
El capitalismo contribuye a elevar el nivel de vida y una caída en los niveles de pobreza. Dentro de una sociedad capitalista, cada individuo tiene la oportunidad de crear riqueza dentro de sus vidas. Sin acciones opresivas y la fuerza del estado, el capitalismo permite que un individuo crezca y prospere fácilmente en toda la economía al permitirle participar en cualquier acción que crea que lo beneficiará mejor.
Rumbo Propio es un Partido Liberal Clásico, es de derecha, sin miedo ni complejos. Porque ser de derechas no es delito ni deshonra: es tomar las banderas del Libre Mercado contra el socialismo, de la ley y el orden contra la criminalidad, de la propiedad privada contra las expropiaciones, de crear riqueza contra la pobreza y la miseria, del trabajo y la producción contra el estatismo distribucionista, y de la familia venezolana contra la pauperizacion, desintegración y degradación que hoy la destruyen.
El Socialismo del Siglo XXI tiene un solo oponente de similar contextura, y es el Liberalismo Clásico del Siglo XXI, la Nueva Derecha: el Liberalismo autonomista de las regiones, el verdadero Federalismo. Por eso hay que enterrar el socialismo para siempre. Hay que cambiar el sistema.
En ese propósito estamos. Hay quien dirá que esto es, en definitiva, una cuestión de cambio cultural. Es allí donde definitivamente nuestra consigna calza a la perfección.
EL CAPITALISMO ES LA ÚNICA Y VERDADERA ESPERANZA DE LOS POBRES. La Vida, la Libertad y la Propiedad. Nuestro más preciado anhelo.
Esa
es nuestra obligación y la vamos ejercer difundiendo nuestro ideario para la
construcción de la Nueva República. Seremos
una nación próspera cuando dejemos atrás el socialismo hambreador y pongamos a
Venezuela de primera en toda la región de la mano de la próxima presidenta:
María Corina Machado.
CONSEJO FUNDACIONAL
Editorial
17 de julio 2023
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